NUEVO LAREDO, Tamaulipas a 11 de noviembre de 2024, con información de la Agencia RN Noticias.- Nuevo Laredo se encuentra en alerta y en constante preparación ante la posibilidad de una llegada masiva de migrantes a la frontera. Aunque por el momento los movimientos migratorios en la región han sido bajos, las autoridades locales, en colaboración con el Instituto Nacional de Migración y Protección Civil, siguen trabajando para manejar cualquier eventualidad.
Humberto Fernández Diez de Pinos, director de Protección Civil en Nuevo Laredo manifestó al respeto que “Bueno mira es algo muy específico en donde siempre hemos tenido muy buena coordinación con el Instituto Nacional de Migración y otras entidades federativas con la movilidad de la protección civil. Municipios y estados nos están y nos mantienen informados de los movimientos masivos migratorios en donde al día de hoy las reuniones que hemos tenido en Nuevo Laredo no es un foco directo de visita de movimiento masivo”.
De acuerdo con las autoridades, actualmente las citas para migrantes a través del sistema CBP-1 están programadas con una espera de entre 15 y 20 días, y no es necesario que los solicitantes estén en la frontera durante este tiempo. Pueden hacer su cita desde dentro de México, lo que ha reducido la concentración de personas en los puentes internacionales.
Fernández Diez de Pinos agregó que “ La situación política en Estados Unidos pues bueno sabemos que mucha gente piensa que se puede abrir fronteras más sin embargo eso es incierto puesto que nosotros sabemos que la última palabra la decisión final la tienen ellos y no es bueno predecir porque no podemos hacerlo es importante estar solamente preparados para que en caso de algún movimiento masivo migratorio bueno como ha pasado en Nuevo Laredo lo que ha llegado lo hemos manejado lo hemos trabajado con profesionales y de esta manera pues bueno hemos desaforado la región sin poner en riesgo los habitantes de Nuevo Laredo”
A pesar de que la situación política en Estados Unidos sigue siendo incierta, las autoridades mexicanas subrayan que se mantienen preparadas para cualquier movimiento masivo, como ha ocurrido en el pasado. Hasta el momento, los albergues municipales tienen aforos bajos, y los migrantes que han llegado a la ciudad suelen permanecer solo uno o dos días, para luego continuar su viaje hacia el norte.
